La reactivación del virus de hepatitis B (VHB) es un síndrome caracterizado por el aumento de la viremia de VHB en personas con hepatitis B crónica (HBC) o la aparición de partículas virales en pacientes con hepatitis B resuelta (HBR). Este cuadro puede implicar una importante carga de morbilidad, por lo que el manejo clínico debe ser orientado a la prevención.
La reactivación puede ocurrir en forma espontánea, pero más frecuentemente es desencadenada por la inmunosupresión (IS): Tratamientos quimioterápicos, uso crónico con corticoides, drogas modificadoras de la respuesta biológica, trasplantes, etc.). La fisiopatología de este proceso está mediada por el DNA viral en su forma circular covalentemente cerrada (DNA VHB ccc), el cual persiste en el núcleo del hepatocito luego de la infección aguda. Clínicamente, se puede manifestar de múltiples formas: reactivación silente, hepatitis o falla hepática fulminante.
Natalia Laufer - Gabriela Poblete
Natalia Laufer
A pesar de la disponibilidad de una vacuna efectiva por más de 3 décadas, la hepatitis B continua siendo un problema importante para la salud pública y una de las principales causas de hepatitis crónica, cirrosis y hepatocarcinoma a nivel mundial[1].