El conocimiento sobre la COVID-19 evoluciona con la velocidad de la pandemia. La comunicación responsable, el compartir las experiencias y la colaboración transparente y abierta, permitirá que los caminos a recorrer para prevenir y controlar esta enfermedad sean mucho más cortos y efectivos.
Desde la Asociación de Psiquiatras Argentinos (APSA) y la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) queremos expresar nuestra preocupación ante el contexto sanitario que atraviesa nuestro país a raíz de la pandemia provocada por el coronavirus SARS-CoV-2.
Se acerca el verano y con él llegan para muchos las ansiadas vacaciones.
Una parte importante de la población en nuestro país planificará viajar durante los próximos meses, para visitar familiares o con fines de ocio, siendo que durante el mes de diciembre se habilitaron las actividades turísticas en gran parte del país, y se autorizaron los viajes al exterior.
En la situación epidemiológica mundial actual , cualquier viaje plantea riesgos de contraer o transmitir COVID-19, pero existen numerosas medidas y precauciones que podemos tomar para minimizar este riesgo.
Como todos sabemos, se acerca la celebración de Navidad y Año Nuevo, ese momento del año que muchos esperamos con ansias para reunirnos con aquellos que más queremos y compartir un grato encuentro.
En este año tan particular, seguramente nos preguntamos cómo podemos mantener esta tradición sin ponernos en riesgo.
Las reuniones numerosas, llevadas a cabo en zonas de transmisión comunitaria activa o con utilización de transporte interurbano, y sin cumplimiento de las medidas de prevención adecuadas, ponen en riesgo de contraer COVID-19 a todos los participantes , en especial a aquellos más vulnerables, que pueden desarrollar formas más graves de la enfermedad.
Existen numerosas estrategias para minimizar el riesgo de transmisión de SARS Cov2 en la comunidad, y muchas de ellas son útiles al momento de planificar estos eventos.